Caribes supo rescatar el partido 

Venezuela pasa a siguiente fase a expensas del Cibao

El partido parecía írsele de las manos a Caribes de Anzoátegui, pero una vez más apeló a su carácter para venir de atrás y derrotar 6-5 a los Gigantes del Cibao, en el Estadio Municipal Hiram Bithorn de Hato Rey.

Fue la segunda victoria de los orientales, que lograron clasificarse a las semifinales de la Serie del Caribe 2015.

La ofensiva de la tribu apenas necesitó un par de innings para definir el encuentro contra uno de los rivales más difíciles del certamen caribeño.

“Nunca bajamos la guardia, en todas las instancias de la temporada hemos clasificado temprano. Esta vez no fue diferente. Logramos mantener la intensidad”, destacó el manager Omar López.

El campeón venezolano remontó una diferencia de dos carreras en la parte baja de la primera entrada, gracias a un racimo de cuatro rayitas, coronadas con doble de Oscar Salazar, impulsor de dos compañeros contra el derecho Edward Valdez.

“Logramos aprovechar sus envíos y hacer las conexiones importantes”, puntualizó Salazar.

 

Pero el Cibao volvió a reaccionar y pisó el plato tres veces más en el segundo tramo, amparado en el descontrol de Yaiper Castillo y a la complicidad de un inefectivo Eric Niesen, que encajó un doble y se complicó con un error en tiro de tres bases, que colocó el juego 5-4.

“Los abridores trabajaron detrás de la cuenta y los grandes bateadores de ambos conjuntos pudieron capitalizar sus errores”, explicó López. “Pero de allí en adelante fue una cátedra de pitcheo de ambos lados. En nuestro caso, el bullpen hizo envíos de calidad para salir de las situaciones difíciles”.

Jean Toledo fue llamado con un corredor en la antesala y apenas un out. Entonces dominó con ponche cantado a Maikel Franco y luego a Luis Jiménez con elevado a la derecha. El derecho retiró a los cinco enemigos que enfrentó en el partido.

“En esa entrada ganamos. Toledo evitó que produjeran dos de los grandes bateadores de Gigantes”, destacó López.

En las dos primeras entradas, los dominicanos ligaron de 6-3 con hombres en posición de anotar y en las siguientes siete se fueron d 10-0. El relevo de Anzoátegui apenas permitió dos anotaciones de los nueve corredores que heredó en las almohadillas.

Pero antes la ofensiva volvió a responder. Niuman Romero empató el desafío con un largo cuadrangular por la derecha, contra Carlos Pimentel, y Balbino Fuenmayor, que apenas había sacado la bola del cuadro una vez en la serie, sacudió doble que llevó hasta el plato a Alexi Amarista desde primera, tras negociar boleto después de un out.

“Es una muestra de lo que puedes hacer si no pierdes la concentración”, enfatizó López sobre el inicialista, una de las figuras silenciosas de los indígenas.

 

ALEXANDER MENDOZA/ San Juan

Foto: AVS PHOTO REPORT